ALANTRE León-Llión suspende al alcalde José Antonio Diez en Participación Ciudadana y en Calidad democrática

• La eliminación del Presupuesto Participativo, el boicot al Congreso de Democracia y la ausencia de consultas vecinales evidencian un talante cuasi autoritario.

• Seis años de mandato marcados por el deterioro de los servicios de atención a la ciudadanía, el incumplimiento de la Ley de Memoria Democrática y el desinterés por la opinión vecinal.

24/12/25 (León). Desde Alantre León-Llión creemos que está más que acreditado el suspenso en participación y calidad democrática del alcalde de León con la eliminación del Presupuesto Participativo anual, una Oficina de Información y Atención a la Ciudadanía obsoleta, el mantenimiento de calles con nombres franquistas, su boicot al primer Congreso Nacional de Participación y Democracia “León Cuna del Parlamentarismo”, hablar por los vecinos en asuntos relevantes sin convocar la correspondiente consulta vecinal, su reprobación en el Pleno por falta de transparencia, por ejemplo.

Las formas y talante del alcalde José Antonio Diez y su prioridad de repetir alcaldía, primando el rédito electoral en su gestión y no el interés general de los vecinos, provoca la desatención de la Participación Ciudadana y merme de la calidad democrática en el municipio capitalino. 

En el ciclo geopolítico actual en el que la Democracia se encuentra amenazada con asaltos a Parlamentos, gobernantes autoritarios invadiendo otros estados, la comisión de crímenes de guerra y genocidios, el abandono de los organismos internacionales garantes de los Derechos Humanos, el rechazo  del multilateralismo y adopción un nacionalismo excluyente … urge más que nunca empoderar a la ciudadanía y consolidar la práctica y los valores democráticos.

Desde lo local, lejos de contribuir a corregir esta deriva democrática global, el alcalde de León, con su talante cuasi autoritario, viene recortando la Participación Ciudadana y dando un pobre ejemplo de compromiso democrático.

Como dato confirma relato, se apuntan los siguientes hechos como un primer capítulo de una larga saga:

Eliminación del Reglamento de Consultas Vecinales en 2024 y la obligación de convocar cada año el Presupuesto Participativo, rompiendo con ello la trayectoria iniciada con los presupuestos participativos realizados en 2021, 2022 y 2023.  A su vez, sustrajo a los vecinos el millón cuarenta y dos mil euros asignados en el presupuesto municipal para ejecutar las propuestas más votadas por los vecinos en el presupuesto participativo de 2023.

El Boicot al primer Congreso Nacional de Participación y Democracia, “León, Cuna del Parlamentarismo”, organizado por la Concejalía de Participación Ciudadana en mayo de 2022, Congreso del que fueron embajadores Manuela Camena y Rogelio Blanco. El boicot consistió en el rechazo de Diez a realizar la apertura del Congreso, en prohibir a los tres concejales del PSOE inscritos en el mismo a participar en él, y en consentir que tanto la Directora del Auditorio como la responsable de sala se ausentaran del trabajo en las dos jornadas de celebración del Congreso.  

Y lejos de consultar a los vecinos de León, especialmente a quienes residen en los barrios de la Asunción y San Mamés, si deseaban que los trenes de FEVE llegaran hasta la estación de Matallana o que ese último tramo se transformara en una vía verde, pone en boca de ellos que “los vecinos afectados por el corredor están más que adaptados a la situación actual sin ferrocarril”. ¿A qué vecinos consultó?, ¿y por qué no les preguntó directamente convocando una consulta vecinal aplicando el Reglamento de Consultas vecinales en vigor? o también a los vecinos de Puente Castro, La Lastra, Armunia o Trabajo del Cerecedo sobre la contestación vecinal y la opinión de las vecinos y vecinas sobre la instalación de la Macro planta de Biomasa.

También José Antonio Diez Díaz ha sido el primer alcalde reprobado por el Pleno municipal en 2023 por aceptar la invitación para asistir a gastos pagos en diciembre de 2022 al mundial de fútbol celebrado en Qatar, un viaje valorado en más de 20.000 euros y con los siguientes agravantes: falta de transparencia al no figurar el viaje en la agenda del alcalde, acudir acompañado por su cónyuge, manipular a la opinión pública realizando una rueda de prensa posterior acompañado por personalidades de referencia, Presidente de la FELE, Presidente de la Cámara de Comercio, Rector de la Universidad, representantes de la Cultural y Deportiva Leonesa, para justificar el viaje con la consecución de inversiones para León que hasta el día de hoy no han llegado.

En sus seis años de mandato el alcalde ha dejado obsoleta, al borde del colapso, la Oficina de Información y Atención a la Ciudadanía, siendo esta oficina el servicio municipal básico de comunicación de los vecinos con el Ayuntamiento. Así, ha reducido de seis empleados en 2019 a dos en 2025 el personal de esta oficina; no ha puesto freno al mal funcionamiento del servicio externalizado de Centralita (teléfonos 010 y 987 895 500 / 503); no ha renovado el contrato de la Línea Verde, en sus versiones App y web, siendo esta la vía principal de entrada de las quejas; no ha querido modernizar la Oficina contratando una Plataforma digital de Atención a la Ciudadanía que iba a permitir una entrada multicanal de las quejas: Whatsapp, teléfono, e-mail, Sede electrónica…, un seguimiento de las quejas por parte de los vecinos, la generación de estadísticas fiables de las quejas presentadas, informar a los vecinos de los eventos municipales.

Todo ello se une a que se sigue sin cumplir la Ley de Memoria Democrática permitiendo que una treintena de calles con nombres franquistas no sean redenominadas con nombres democráticos, existiendo un listado de nombres elaborado por la Universidad de León con este fin o la política arboricida contraria a la tendencia general de reverdecer la ciudades del futuro.

En fin, todo un cúmulo de acciones y omisiones, y mucho postureo de palio, fuegos artificiales y leonés en rotondas, y poco de servicios públicos de calidad con el personal adecuado, una ciudad que se adapte al cambio climático y que sepa, fomente e invierta en la opinión de sus vecinos con una participación ciudadana ejemplar.